domingo, noviembre 13, 2011

"It's no secret that a friend is someone who lets you help"


Todos tenemos nuestros miedos. Todos. Y no hay miedos mejores ni peores. Miedos más lógicos y miedos menos lógicos. Miedos más relevantes o menos importantes. Porque el miedo es libre y, en esto, no hay mejores ni peores.

Es fácil hacerse el valiente a los ojos de los demás, lo dificil es realmente serlo, lo difícil es tener el arrojo y gallardía suficiente como para confesar los miedos y saber pedir ayuda a tiempo, antes de tener que rogar, más adelante, socorro. Porque hay que ser muy valiente para saber reconocer nuestras flaquezas, si bien ya es bastante hacerlo ante nosotros mismos, aún lo es más hacerlo ante los demás.

A todos nos cuesta contarlos y mucho más pedir ayuda. Y todos creemos que si pedimos ayuda y mostramos nuestros miedos seremos frágiles, seremos endebles a los ojos de los demás. Y a todos nos pasa no saber pedir ayuda. Y a todos nos cuesta aceptarla. Y todos nos equivocamos.

Y nos equivocamos porque no es más valiente el que lucha por enfrentar sus miedos sólo, no es más valiente el que dice no tener miedo porque, en tal caso, sólo sería un inconsciente o un simple mentiroso. Porque no somos superhéroes y, aunque lo fuéramos, todo superhéroe tiene su criptonita que debe paliar. 

Y esta empresa es mucho más fácil cuando no la emprendemos sólos, cuando sabemos apoyarnos en los demás, cuando somos capaces de buscar un amigo por el que dejarnos ayudar. Porque un amigo es eso, un amigo es alguien a quien le permites ayudarte.

Con los colegas te vas, de vez en cuando, de fiesta. Vas a comer alguna vez, a cenar o te tomas un café. A veces, te vas de compras. Hasta te puedes ir de viaje con ellos. Compartes anécdotas, risas, situaciones divertidas, cotilleos. 

Ni siquiera tiene por qué ser un amigo a quién le confiesas tus mayores secretos  porque, como se suele decir, las mayores verdades son aquellas que cuentas a un desconocido.

Los colegas pueden ser amigos mas no todo colega es un amigo. Con un amigo compartes confidencias, secretos y, por supuesto, miedos. Porque realmente un amigo es eso, a quién confiamos nuestros miedos y, por supuesto, a quién le pedimos ayuda y, cuando nos la presta, le dejamos ayudar a tiempo, no a quién posteriormente se lo contamos cuando todo ha pasado.
 
Podemos tener muchos colegas, los que queramos, para algunos, tantos como quepan en su facebook y a los que colocan la etiqueta"amigos". Pero, ¿En cuántos nos apoyamos cuando el miedo nos invade?, ¿Somos realmente amigos de nuestros amigos?, ¿Les permitimos serlo?, ¿Nos dejan serlo?

A veces es vergüenza, pero, ¿un amigo se avergonzaría de nosotros? Otras veces es miedo a parecer débiles delante de ellos, pero ¿un amigo nos juzgará alguna vez por eso? Algunas otras es simple orgullo, pero ¿tiene sentido el orgullo con los amigos o con los amigos el orgullo es siempre absurdo? Podría buscar muchas excusas más pero serían otras excusas sin sentido.
 
El valor de nuestros amigos esté ahí, reside ahí. En que están cuando los necesitamos y, sobretodo y especialmente, en que cuando los necesitamos les permitamos estar. Así que si eres mi amigo, deja de llamarme "amiga" y simplemete permíteme serlo.

Así que, ya sabes, si me necesitas, silba. Si eres mi amigo, mejor dicho, no dejes de hacerlo.





No hay comentarios:

Publicar un comentario